Advirtió que los últimos ataques aéreos alarmantes corren el riesgo de empeorar seriamente el impacto ya devastador que la lucha está teniendo sobre los civiles.
“Desde el 31 de agosto, hemos recibido numerosos informes de bajas civiles y destrucción de bienes civiles debido a ataques aéreos y de artillería en Tigray; las interrupciones en las comunicaciones hacen que sea particularmente difícil verificar los informes, pero está claro que el número de víctimas entre los civiles es absolutamente asombroso”, dijo el Sr. Türk.
Denuncian asesinato de cooperante
Las tropas del gobierno etíope y las fuerzas de Tigray han estado en guerra durante casi dos años. Hubo una pausa en los combates luego de una tregua humanitaria de cinco meses, anunciada a fines de marzo, pero las hostilidades han estallado nuevamente.
Un miembro del personal del Comité Internacional de Rescate, una organización no gubernamental, se encontraba entre los muertos en incidentes recientes.
El trabajador humanitario formaba parte de un equipo que entregaba asistencia humanitaria a mujeres y niños. Su muerte fue “completamente inaceptable”, dijo Türk.
“También estoy profundamente preocupado por la riesgo significativo de escalada a la luz de la continua movilización masiva de soldados y combatientes por parte de varias partes en el conflicto”, agregó.
Los ataques podrían ser crímenes de guerra
El jefe de derechos humanos de la ONU hizo un llamado a las partes en conflicto para que pongan fin a su conflicto y trabajen por la paz.
Les recordó su obligación de respetar el derecho internacional de los derechos humanos, así como el derecho internacional humanitario, incluso tomando medidas para proteger a los civiles y permitir que los trabajadores humanitarios accedan a las personas necesitadas.
“Según el derecho internacional, los ataques indiscriminados o los ataques dirigidos deliberadamente contra civiles o bienes civiles constituyen crímenes de guerra”, dijo el Sr. Türk.
Además, subrayó la necesidad de apoyar los esfuerzos para garantizar la rendición de cuentas por violaciones y abusos graves del derecho internacional cometidos durante el conflicto.
El nuevo Alto Comisionado
El Sr. Türk fue nombrado Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos en septiembre, convirtiéndose en la octava persona en ocupar el cargo.
El veterano diplomático austriaco tiene unas tres décadas de experiencia en todos los continentes en derechos humanos, derecho internacional y protección, incluso con la agencia de la ONU para los refugiados, ACNUR.
El nuevo jefe de derechos asumió el cargo el lunes y enfatizó que “siempre se guiará, ante todo, por el impacto que nuestro trabajo tiene en las personas a las que servimos”.
Reemplazó a la expresidenta de Chile dos veces elegida, Michelle Bachelet, quien se desempeñó como Alta Comisionada desde el 1 de septiembre de 2018 hasta el 31 de agosto de 2022.
