Según informes de prensa, el pistolero, conocido por las autoridades y ex alumno de la escuela Número 88, llevaba una esvástica nazi en su camiseta durante el ataque, y las autoridades rusas están investigando los presuntos vínculos neonazis del autor.
En una declaración emitida por su Portavoz Adjunto, el Secretario General de la ONU António Guterres, fuertemente condenó el “acto de violencia, y expresa su más sentido pésame a las familias de las víctimas, así como al Gobierno y al pueblo de la Federación Rusa. Desea a los heridos una pronta y completa recuperación.”
Los informes noticiosos dijeron que el atacante, que tenía poco más de 30 años, mató a dos guardias de seguridad en la escuela y luego abrió fuego contra estudiantes y maestros. Todos menos dos de los heridos eran niños. Estaba armado con dos pistolas y una gran cantidad de municiones.
La escuela está ubicada en el oeste de Rusia, a unas 600 millas (965 kilómetros) al este de Moscú. Izvesk es la capital de la República de Udmurtia.
‘Hacer que las escuelas sean seguras’
La directora de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura, la UNESCO, Audrey Azoulay, tuiteó que estaba profundamente conmocionada por los disparos contra los niños y sus maestros en la escuela.
“Condeno enérgicamente este horrendo ataque. Más sentido pésame a (las) familias de las víctimas y al pueblo ruso. Necesitamos acción inmediata para detener esta violencia sin sentido.y hacer que las escuelas sean seguras”.
La jefa del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF), Catherine Russell, tuiteó más tarde el lunes que «miTodo niño tiene derecho a estar seguro en la escuela, dondequiera que esté y cualesquiera que sean sus circunstancias..»
Según los informes, el atacante había sido registrado en un centro psiquiátrico local.
Ha habido varios tiroteos en escuelas en Rusia en los últimos años, incluso en la capital provincial de Kazan, en mayo de 2021, cuando un hombre armado mató a nueve personas (siete estudiantes y dos empleados) y en septiembre pasado, cuando seis murieron y 47 resultaron heridas. en un campus universitario, en la ciudad de Perm.
En respuesta a esos incidentes, el gobierno ruso habría endurecido las leyes de posesión de armas.
