Ucrania tiene un sistema de defensa aérea único: ningún otro país del mundo depende de pequeños drones de un solo uso para defender su espacio aéreo. Sin embargo, esta innovación nació de la necesidad y es un buen ejemplo de en qué se ha convertido la guerra moderna. Los drones interceptores ucranianos están persiguiendo a los rusos Geran-2, Orlan-10, Molnyas y otros drones. Pero también están derribando objetivos mucho más pequeños.
Mavic a los ojos de un dron interceptor ucraniano (Captura de pantalla)
Si bien puede parecer contradictorio, los pequeños drones lentos son en realidad los más difíciles de rastrear. Existen sistemas de radar móviles capaces de detectarlos, pero los cuadricópteros más pequeños pueden confundirse fácilmente con aves. Al ser eléctricos, tampoco dejan una huella térmica fuerte. Y como son muy rápidos y ágiles, detectarlos a simple vista también es bastante difícil. Todo esto para decir que los drones más grandes, como los Geran-2, Molnyas y los UAV de reconocimiento antes mencionados, son más fáciles de detectar e interceptar.
Sin embargo, los drones interceptores ucranianos ya están atacando a los Mavic rusos:
Si bien DJI Mavic es una marca de un pequeño dron cuadricóptero, los ucranianos (y los rusos) con frecuencia llaman a todos los pequeños drones desarmados «Mavics». No todos los drones ucranianos “Mavics” que interceptan son cuadricópteros DJI Mavic.
Estos pequeños drones se utilizan principalmente para reconocimiento en el campo de batalla. Están volando alrededor, buscando las posiciones de las fuerzas opuestas. Sin embargo, algunos Mavics modificados son capaces de lanzar pequeñas cargas explosivas, como granadas de mano. En ambas funciones, es importante interceptar estos drones para que el enemigo no tenga los ojos puestos en el campo de batalla ni en los minibombarderos.
Los ucranianos han perfeccionado su sistema de defensa aérea basado en drones de manera que ahora pueden rastrear objetivos muy pequeños. En ese momento, le corresponde al piloto encontrar el Mavic y estrellarlo. Sin embargo, tal como avanza la tecnología, en un futuro muy cercano toda esta tarea podría automatizarse. Y podría tener un gran impacto.
Los drones de combate FPV son aproximadamente del mismo tamaño o más grandes. Pueden ser interceptados exactamente de la misma manera. Lo ideal sería que fueran derribados al acercarse, lejos de posiciones amigas. Cada vez más, estos FPV se controlan mediante cables de fibra óptica, lo que significa que son inmunes a las interferencias y deben destruirse físicamente. Si los ucranianos pueden hacer eso más lejos de ellos con la ayuda de drones, sería un sistema de defensa aérea bastante bueno en este micro nivel.
Escrito por Póvilas M.
Fuente: Sternenko en Facebook
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