Comunicado de www.vaticannews.va —
En la ciudad emiliana nace, gestionado por Cáritas, un servicio para los más frágiles promovido por la Limosnería Apostólica, siguiendo el proyecto de las Lavanderías del Papa Francisco. León XIV ha apoyado el cambio de la nueva denominación: el pobrecillo de Asís, de hecho —como destaca en la Dilexi te— continúa inspirando iniciativas en apoyo de las personas pobres. A inaugurar la estructura, el cardenal Konrad Krajewski, limosnero del Papa.
Benedetta Capelli – Ciudad del Vaticano
San Francisco de Asís: es a esta “figura luminosa”, como escribe el Papa León en la te amaba fechada el 4 de octubre de 2025, fiesta litúrgica del santo, a la que la Iglesia mira para sembrar bien, esperanza y cuidado. Es a él a quien Bergoglio pensó eligiendo su nombre de Pontífice, abrazando la idea de una vida sencilla, pobre y toda orientada hacia Dios. En la elección de la denominación de la lavandería que hoy, 6 de noviembre a las 12, abre en Parma en Borgo San Giuseppe n.º 15 se puede ver un signo de continuidad.
El papa León XIV ha subrayado en su Exhortación Apostólica que San Francisco continúa “inspirándonos” y, por tanto, la iniciativa de las “Lavanderías del Papa Francisco”, promovida por la Limosnería Apostólica con el apoyo de la empresa Procter & Gamble, asume así una nueva denominación convirtiéndose en “Lavandería de San Francisco de Asís”. “Tomará el nombre —se lee en un comunicado del Dicasterio para el Servicio de la Caridad— del Santo Patrón de Italia, como modelo de pobreza evangélica y de fraternidad universal”.
El cardenal Krajewski en Parma
A cortar la cinta de la estructura obtenida en los locales de la parroquia de San Giuseppe, fue el cardenal Konrad Krajewski, limosnero del Papa, que a las 11 celebró junto al obispo de Parma, monseñor Enrico Solmi, la misa con los pobres y los voluntarios en la Catedral de Santa María Asunta. Tras la inauguración está previsto un almuerzo con las personas que ayudan a los sin techo y a los más indigentes, un momento de convivialidad para brindar por la nueva iniciativa.
Tocar la carne que sufre
Para explicar su sentido, el cardenal limosnero remite una vez más a la te amaba y en particular al pasaje en el que el Papa recuerda que siempre es “mejor hacer algo que no hacer nada” y que, si bien los pequeños gestos no son “la solución a la pobreza en el mundo”, es necesario ejercitarse “en la limosna para tocar la carne que sufre de los pobres”. Palabras que, según Krajewski, son “una nueva llamada a la acción” hacia quienes son invisibles a los ojos del mundo.
El obispo de Parma: en ayuda de los pobres para seguir siendo humanos
Contento por la iniciativa que será gestionada por Cáritas de Parma está monseñor Enrico Solmi, obispo de la ciudad ducal, para quien la inauguración de la lavandería representa “una valiosa pieza que completa el mosaico de atenciones y servicios de Cáritas a la persona en dificultad, en sus diversas necesidades primarias”. Una iniciativa que ve la colaboración de distintos sujetos, desde la Limosnería Apostólica hasta las empresas que han contribuido a la realización del proyecto. “Gracias a las personas que vienen a pedirnos ayuda: su rostro —concluye el obispo— es un continuo llamamiento a seguir siendo humanos y a hacer más humana y justa nuestra convivencia”.
Para reencontrar la dignidad
La primera lavandería para los pobres y dedicada al Papa Francisco fue abierta en 2017 en Roma, en el corazón del barrio de Trastevere, dentro del “Centro Genti di Pace” de la Comunidad de Sant’Egidio. Posteriormente la idea fue acogida por otras ciudades como Génova, Turín —donde existen dos estructuras—, Nápoles, Catania y San Ferdinando en la provincia de Reggio Calabria. Un servicio que con el tiempo ha permitido devolver dignidad a las personas que viven en la calle porque también a partir del olor a limpio se puede volver a empezar y se puede devolver a la vida otro perfume.
Se publicó primero como En Parma abre la primera “Lavandería de San Francisco de Asís”


