Cuando se diseñan teniendo en cuenta la experiencia vivida, las herramientas de inteligencia artificial como lectores de pantalla conversacionales, paneles adaptables y subtítulos en tiempo real no solo eliminan barreras; amplían la posibilidad. Transforman el acceso en agencia y libertad para aprender, liderar y contribuir plenamente.
Evitar una «versión más brillante del mismo viejo prejuicio»
Surashree Rahane nació con varias discapacidades físicas, incluido pie zambo y polimelia, una condición en la que las personas afectadas nacen con extremidades adicionales. Al crecer en una familia donde la discapacidad era parte de la vida diaria, nunca la vio como una limitación, sino simplemente como otra forma de navegar por el mundo.
“Mis mentores siempre decían: no busques simplemente empleos, créalos”, comparte. “Así aprendí que el liderazgo en sí mismo es inclusión”.
La Sra. Rahane es ahora la fundadora y directora ejecutiva de Yearbook Canvas, una plataforma tecnológica que se especializa en anuarios digitales para instituciones académicas. Mientras construía su empresa, vio cómo persisten barreras estructurales, como infraestructura inaccesible, redes de financiación sesgadas y sistemas educativos rígidos.
Para abordar estos desafíos, actualmente trabaja con Newton School of Technology cerca de Nueva Delhi, enfocándose en un diseño académico inclusivo y herramientas de aprendizaje basadas en inteligencia artificial que se adaptan al ritmo de cada estudiante. «La IA puede democratizar el acceso a la educación», afirma, «pero sólo si le enseñamos a comprender a los diversos estudiantes. De lo contrario, corremos el riesgo de crear una versión más brillante del mismo viejo prejuicio».

Las tecnologías de asistencia empoderan a las personas con discapacidad.
‘El gran empate’
Desde herramientas de voz a voz para personas con discapacidades del habla hasta controles de sillas de ruedas basados en gestos, la tecnología está rompiendo barreras que antes se consideraban permanentes.
Prateek Madhav, director ejecutivo de la Fundación AssisTech (ATF), describe la IA como «el gran igualador». «Si bien al mundo le preocupa que la IA se lleve puestos de trabajo», afirma, «para las personas con discapacidad, la IA los está creando».
Ketan Kothari, consultor del Centro de recursos para personas con discapacidad visual de Xavier en Mumbai, demuestra cómo las herramientas de inteligencia artificial lo han hecho completamente independiente en el trabajo. “Hoy puedo formatear un documento, acceder a reuniones con subtítulos en vivo e incluso generar descripciones visuales a través de aplicaciones”, explica. «La IA ha convertido la imaginación en función».
Purple Fest presenta predominantemente a empresarios y líderes empresariales indios pero, como reflexiona Tshering Dema de la Oficina de Coordinación del Desarrollo de las Naciones Unidas, «esta no es una historia de un solo país: es una transición global. La inclusión no se trata sólo de leyes o infraestructura; se trata de una mentalidad y un diseño compartido. El futuro del trabajo debe construirse no sólo para las personas, sino con ellas».