En declaraciones a periodistas en la Oficina de las Naciones Unidas en Ginebra, Shoko Arakaki, director de asuntos humanitarios de la agencia de salud reproductiva de las Naciones Unidas (UNFPA), dijo que los servicios esenciales se han visto gravemente afectados, mientras que los incidentes de violaciones y violencia sexual relacionada con el conflicto han aumentado en un tercio en comparación con el año pasado.
“Las mujeres y niñas congoleñas soportan un sufrimiento tremendo, pero nunca pierden sus esperanzas”, dijo, y agregó que incluso antes de la escalada más reciente del conflicto, tres mujeres morían cada hora por complicaciones relacionadas con el embarazo y el parto en el país.
Durante su visita a la capital, Kinshasa, y a Goma, en el este, la Sra. Arakaki vio de primera mano las duras realidades que enfrentan las mujeres y las niñas. Conoció a parteras que seguían dando a luz a bebés en condiciones extremadamente difíciles y escuchó a madres que lo habían perdido todo.
Crisis humanitarias desatendidas
«Las mujeres y las niñas también están siendo violadas, explotadas y abusadas en los campos, en el tránsito y dentro de sus propias comunidades», afirmó.
La República Democrática del Congo, a menudo descrita como una de las crisis humanitarias más desatendidas del mundo, sigue enfrentándose a niveles alarmantes de violencia de género. Según informes recientes, los incidentes de explotación, abuso y coerción sexuales son generalizados, especialmente en campos de desplazados superpoblados, donde las medidas de protección y seguridad siguen siendo limitadas.
La crisis se ve exacerbada aún más por el hambre crónica y la falta de oportunidades de subsistencia para las comunidades desplazadas y de acogida.
En toda la República Democrática del Congo, la demanda de ayuda de emergencia está aumentando considerablemente y se prevé que 27 millones de personas necesitarán asistencia humanitaria en 2025. Sin una solución al conflicto en curso en las provincias orientales, se espera que la situación humanitaria y de desplazamiento se deteriore aún más.
Sobrevivientes de múltiples violaciones
La Sra. Arakaki relató haber conocido a una niña de 14 años que había sobrevivido a múltiples violaciones y se estaba recuperando de una cirugía en un hospital apoyado por el UNFPA, mientras aún aferraba su sueño de regresar a la escuela.
Actualmente, el UNFPA proporciona a mujeres y niñas de la República Democrática del Congo servicios de salud esenciales, dirigidos a 1,4 millones de personas. La agencia pide urgentemente un aumento de fondos para brindar atención reproductiva que salve vidas a quienes la necesitan con urgencia, incluido tratamiento médico y apoyo psicosocial para los sobrevivientes de violencia de género.
La agencia también instó a todas las partes en el conflicto a cumplir con sus obligaciones legales de proteger a los civiles y la infraestructura civil –incluidas las instalaciones de salud– y a garantizar la entrega segura y sin obstáculos de la ayuda humanitaria dondequiera que sea necesaria.
