«Vientos destructivos, peligrosas marejadas ciclónicas y lluvias catastróficas» azotarán la región, advirtió el portavoz de la ONU, Stéphane Dujarric.
Continuando trabajando estrechamente con los Coordinadores Residentes y los Equipos de País de la ONU, la ONU desplegará personal adicional en Cuba y Jamaica esta semana, como parte de esfuerzos más amplios para reforzar la preparación para emergencias y coordinar las operaciones de respuesta sobre el terreno.
En una publicación en X, OCHA dijo que se habían fortalecido los preparativos en Cuba, incluyendo:
- Más de 100 toneladas de arroz para la zona oriental del país
- Kits de higiene para 6.500 personas
- Bonos de combustible
- Mensajes de prevención continuos
Además, la ONU ha asignado alrededor de 4 millones de dólares para Cuba del Fondo Central de Respuesta a Emergencias (CERF) de la ONU antes de la tormenta.
Además, se está prestando especial atención a Haití, una nación que ya lucha contra la violencia de las pandillas, las enfermedades y la violencia de género. OCHA y sus socios están ayudando a las autoridades nacionales a fortalecer la preparación y mitigar los posibles impactos del huracán.
Las autoridades del país informaron que las necesidades prioritarias incluían refugio de emergencia, artículos domésticos esenciales, kits de higiene y limpieza, agua potable y apoyo logístico adicional para llegar a zonas aisladas.
Un barrio de Cap Haitien, en el norte de Haití, está inundado tras las fuertes lluvias. (archivo)
Esfuerzos coordinados
El Programa Mundial de Alimentos está brindando apoyo logístico, generadores y asistencia alimentaria a familias en Jamaica, que podría experimentar la tormenta más poderosa jamás registrada, mientras que el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) ha colocado previamente suministros de agua, saneamiento y protección infantil.
Mientras tanto, la Organización Panamericana de la Salud está reforzando las operaciones de emergencia sanitaria, la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) está preparando apoyo para alojamiento y otros socios de la ONU se están movilizando para operaciones de socorro.
“América Latina y el Caribe es la segunda región del mundo más propensa a sufrir desastres y los niños se encuentran entre los que corren mayor riesgo”. según Unicef.


