Tras la firma del Acuerdo de Paz de 2016 en Colombia, más de 13.000 excombatientes de las FARC depusieron las armas en un año, entregando casi 9.000 armas, 38.000 toneladas de explosivos y millones de municiones.
Jenča señaló que, a pesar de los desafíos actuales, la implementación del acuerdo ha mejorado significativamente la seguridad y la confianza entre las comunidades. Alrededor de 11.000 excombatientes participan actualmente en proyectos de desarrollo y otras actividades de implementación.
“Están construyendo un futuro nuevo, pacífico y productivo: construyendo hogares duraderos, resolviendo problemas juntos y avanzando.«, dijo Noticias ONU.
También destacó las primeras condenas de la Jurisdicción Especial para la Paz por crímenes cometidos durante el conflicto, calificándolas de “un hito crucial hacia la rendición de cuentas”.
Apoyo y escrutinio
En una reciente sesión del Consejo de Seguridad de la ONU, Estados Unidos cuestionó el mandato ampliado de la Misión, diciendo que reflejaba “prioridades políticas excesivas” y prometió “revisar cuidadosamente” su apoyo continuo.
Jenča respondió que tales evaluaciones eran “normales”, pero destacó que los otros 14 miembros del Consejo habían expresado un claro apoyo a la renovación del mandato de la Misión, votación prevista para finales de esta semana.
El recién nombrado Jefe de la Misión de Verificación de la ONU en Colombia, Miroslav Jenča, visita algunos de los proyectos de implementación del Acuerdo de Paz.
Sobre el terreno, la Misión goza de un amplio respaldo del gobierno colombiano y de todo el espectro político.
“Hablé tanto con miembros de la oposición como con representantes del gobierno; todos apoyaron la continuación de la Misión, aunque algunos sugirieron ajustes”, dijo el Sr. Jenča.
Reconoció que sostener las operaciones requeriría financiación adicional y destacó las esperanzas de una cooperación más estrecha a medida que Colombia se una al Consejo de Seguridad en 2026 como miembro no permanente.
Un ejemplo global de construcción de paz
En momentos en que el multilateralismo enfrenta escepticismo, Jenča dijo que el proceso de paz de Colombia se destaca como “un brillante ejemplo de negociación y colaboración”, beneficiando no sólo al país sino al mundo.
De cara al próximo período electoral de Colombia, el Sr. Jenča reafirmó el compromiso de la Misión de garantizar una campaña segura y pacífica.
“Nuestro objetivo es promover el entendimiento entre los actores políticos y garantizar un ambiente de paz, seguridad y respeto a los derechos humanos”, concluyó.

 
                                    
