El Foro de Sevilla sobre la Deuda promoverá préstamos más justos, una reestructuración más rápida y una reforma a largo plazo del sistema financiero de posguerra.
Organizado por España y apoyado por las Naciones Unidas, el foro está diseñado para mantener la atención mundial sobre la crisis de la deuda y al mismo tiempo convertir en acciones concretas los compromisos firmes asumidos en la Cuarta Conferencia Internacional sobre Financiamiento para el Desarrollo (FFD4) celebrada en junio en Sevilla.
Los gobiernos, los ministros de finanzas y los acreedores de países desarrollados y en desarrollo se unirán para lo que el Secretario General de la ONU llama “un diálogo global sobre la deuda”, cuyo objetivo es lograr justicia financiera y garantizar que el endeudamiento funcione a favor y no en contra de las economías en desarrollo.
“Los países en desarrollo gastan 1,4 billones de dólares anualmente en el servicio de la deuda,”, dijo António Guterres en el lanzamiento en Ginebra.
“Y 3.400 millones de personas viven en países que gastan más en el servicio de la deuda que en salud o educación. Los países nunca deberían tener que elegir entre pagar el servicio de su deuda o servir a su pueblo.«
3.400 millones de personas viven en países que gastan más en intereses que en salud o educación.
Compromiso de acción
El nuevo foro también apoyará el Compromiso de Sevilla, una ambiciosa hoja de ruta acordada en la conferencia FFD4 para hacer que las finanzas globales sean más justas y sostenibles.
Ese documento estableció planes para reducir los costos de endeudamiento, permitir una reestructuración de la deuda oportuna y equitativa y fortalecer la transparencia y la rendición de cuentas.
También estableció un foro de prestatarios, lanzado en Sevilla en julio, para ayudar a los países endeudados a coordinar sus esfuerzos, compartir conocimientos legales y técnicos y amplificar su voz en un sistema dominado durante mucho tiempo por los grandes prestamistas.
Entregando para la gente
El proceso de Sevilla –que incluye tanto el Compromiso como la Plataforma de Acción– refleja una creciente preocupación de que el aumento vertiginoso de la deuda esté descarrilando el progreso hacia los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS).
Más de 60 países en desarrollo gastan ahora al menos el 10 por ciento de los ingresos públicos en pagos de interesesmientras que muchos enfrentan un acceso cada vez menor a un crédito asequible.
Bajo el nuevo marco, los países trabajarán para desarrollar principios compartidos para el endeudamiento y la concesión de préstamos responsables, fortalecer los mecanismos de prevención de crisis y explorar la reforma de la arquitectura de la deuda global, considerada durante mucho tiempo obsoleta y fragmentada.
“El Foro de Sevilla sobre la Deuda ayudar a lograr la justicia financiera que las personas y los países necesitan y merecen«, dijo el Sr. Guterres. «Las Naciones Unidas están orgullosas de ser parte de este esfuerzo, y agradezco al Ministro [Carlos] Cuerpo y Gobierno de España por sus incansables esfuerzos”.