La decisión sigue a una serie de consultas con expertos mundiales.
Ambos términos se utilizarán simultáneamente durante un año antes de que se elimine gradualmente el nombre de viruela del mono.
“Esto sirve para mitigar las preocupaciones planteadas por los expertos sobre la confusión causada por un cambio de nombre en medio de un brote global”, dijo la agencia de la ONU en un comunicado.
Preocupación y cambio
Mpox es una enfermedad viral rara que ocurre principalmente en áreas de selva tropical de África central y occidental, pero este año surgieron brotes en otras partes del mundo.
Hay más de 80.000 casos y 55 muertes, con 110 países afectados.
Cuando se expandió el brote actual, la OMS observó y recibió informes de lenguaje racista y estigmatizante en línea, en otros entornos y en algunas comunidades.
“En varias reuniones, públicas y privadas, varias personas y países expresaron su preocupación y pidieron a la OMS que propusiera una forma de cambiar el nombre”, dijo la agencia.
Nombrar nuevas enfermedades
El nombre de viruela del simio se le dio en 1970, unos 12 años después de que se descubriera el virus que causa la enfermedad en monos cautivos.
Esto fue antes de que la OMS publicara por primera vez las mejores prácticas para nombrar enfermedades en 2015.
Estas directrices recomiendan que los nuevos nombres de enfermedades apunten a minimizar los impactos negativos innecesarios en el comercio, los viajes, el turismo o el bienestar animal.
También deben evitar ofender a cualquier grupo cultural, social, nacional, regional, profesional o étnico.
proceso consultivo
La OMS asigna nombres a enfermedades nuevas y, muy excepcionalmente, existentes, a través de un proceso consultivo.
Se invitó a expertos médicos y científicos, representantes de autoridades gubernamentales de 45 países, así como al público en general, a presentar sus sugerencias.
Sobre la base de las consultas y discusiones posteriores con el Director General de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus, la agencia recomendó la adopción del sinónimo mpox.
Las consideraciones incluyeron la justificación, la idoneidad científica, el alcance del uso actual, la pronunciabilidad, la usabilidad en diferentes idiomas, la ausencia de referencias geográficas o zoológicas y la facilidad de recuperación de información científica histórica.
La OMS adoptará el término mpox en sus comunicaciones y alienta a otros a seguir su ejemplo.
