Los infantes de marina ucranianos aprendieron a diseñar sus propios drones. A veces, estos vehículos aéreos no tripulados se adaptan a los requisitos específicos de la misión directamente en el campo de batalla.
Dron de reconocimiento ensamblado por soldados ucranianos.
Al ser entrevistados por periodistas, los soldados ucranianos explicaron que durante los 6 meses de la guerra contra fuerzas rusas invasoras, en cierto sentido «superaron» a los drones estándar. Después de probar y usar muchos tipos diferentes de plataformas no tripuladas, decidieron comenzar a construir sus propios volantes no tripulados.
Por supuesto, no partieron de cero: todos los conocimientos básicos requeridos fueron proporcionados por los especialistas en esta área. A los soldados se les enseñaron los fundamentos del funcionamiento de todos los componentes de drones y los principios del diseño de drones. Los nuevos aprendices también tuvieron que pasar mucho tiempo aprendiendo a ensamblar y operar sus propios drones diseñados.
“Podemos contrarrestar los intentos de interferir la señal de video, las comunicaciones y el control remoto. Es bastante difícil, porque los ingenieros que desarrollan sistemas de guerra electrónica no se comen el pan gratis”, comentó uno de los militares.
Actualmente, necesitan comprar todos los componentes por su propia cuenta, por lo que tienen recursos limitados.
Un soldado de un batallón de Marines de las Fuerzas Armadas de Ucrania con un dron de fabricación propia
Los combatientes dicen que han creado varios drones: cuatro en forma de avión y dos helicópteros múltiples. Por ejemplo, un dron es un pequeño dron kamikaze llamado “Dolphin Killer”, que funciona en conjunto con un dron de reconocimiento. El dron de reconocimiento encuentra el objetivo y luego observa su destrucción por un dron kamikaze.
Otro ejemplo es un UAV polivalente, que en forma se parece a un pequeño avión de combate. Puede alcanzar velocidades de hasta 210 km/h, volar a una distancia de hasta 20 km del operador y transportar una carga útil de hasta 1 kg. El dispositivo puede desempeñar el papel de un «kamikaze» o realizar un reconocimiento, transmitiendo video desde la cámara al panel de control. La altitud operativa varía de 500 a 1000 m.
Los diseñadores señalan que ahora pueden crear y modificar drones para sus necesidades específicas y misiones de combate específicas, lo que les da a sus propios desarrollos una ventaja sobre los modelos de fábrica listos para usar.
