Los galardonados son Ales Bialiatski, un activista encarcelado en Bielorrusia, la organización de la sociedad civil Memorial, que las autoridades rusas obligaron a cerrar sus puertas el año pasado, y el Centro para las Libertades Civiles con sede en Ucrania.
“Como citó el Comité del Nobel, el reconocimiento de este año destaca un foco en el poder de la sociedad civil para promover la paz”, dijo el secretario general António Guterres.
‘Catalizadores para la paz’
“Los grupos de la sociedad civil son el oxígeno de la democracia y los catalizadores de la paz, el progreso social y el crecimiento económico. Ayudan a que los gobiernos rindan cuentas y llevan las voces de los vulnerables a los pasillos del poder.”
El Sr. Bialatski fue encarcelado en julio de 2021, como resultado del movimiento de protesta masivo contra la disputada reelección del líder bielorruso Alexander Lukashenko. Según los informes, Memorial es una de las organizaciones de derechos humanos más antiguas de Rusia, dirigida por el anterior ganador del premio de la paz, Andrei Sajarov. Desenterró la escala completa del sufrimiento experimentado en los notorios campos de prisioneros de la era estalinista, conocidos como Gulag.
Desde la invasión rusa de Ucrania el 24 de febrero, el Centro para las Libertades Civiles de Ucrania ha comenzado a documentar los abusos contra los derechos humanos cometidos por las fuerzas rusas y sus aliados, habiendo trabajado previamente en exponer los abusos contra los derechos humanos en la Crimea ocupada por Rusia, según informes de prensa.
La presidenta del Comité Noruego del Nobel, Berit Reiss-Andresen, dijo durante el anuncio de los premios que los tres ganadores de la sociedad civil “han promovido durante muchos años el derecho a criticar el poder y proteger los derechos fundamentales de los ciudadanos”.
Una amplia gama de activistas de derechos humanos han sido atacados en Colombia, especialmente aquellos que viven en áreas rurales.
Reducción del espacio cívico
En su declaración, el Sr. Guterres señaló que el espacio cívico se estaba “reduciendo en todo el mundo”. Cada vez más, defensores de los derechos, defensores de los derechos de las mujeres, activistas ambientales, periodistas y otros en el campo de los derechos, “enfrentar arrestos arbitrarios, duras sentencias de prisión, campañas de difamación, multas paralizantes y ataques violentos.”
“Mientras felicitamos a los ganadores de este año, lcomprometámonos a defender a los valientes defensores de los valores universales de la pazesperanza y dignidad para todos”, concluyó el Secretario General.
Ales Bialiatski (segunda a la izquierda) durante la ceremonia del Premio Paweł Włodkowic en el Senado de Polonia en 2014.
