La recomendación sigue a la revisión y análisis de ensayos clínicos para los anticuerpos monoclonales mAb114 (conocidos como Ansuvimab o Ebanga) y REGN-EB3 (Inmazeb), que han demostrado claros beneficios para las personas que han dado positivo en la prueba del Ébola, que a menudo es fatal.
Esto incluye a las personas mayores, las mujeres embarazadas y lactantes, los niños y los recién nacidos cuyas madres se confirmó que tenían ébola dentro de los primeros siete días después del nacimiento.
Prueba de fuego
Los ensayos clínicos se realizaron durante los brotes de ébola. La OMS dijo que el ensayo más grande se llevó a cabo en la República Democrática del Congo, lo que demuestra que se puede aplicar el más alto nivel de rigor científico incluso durante los brotes de ébola en contextos difíciles.
La agencia de la ONU también proporcionó recomendaciones sobre terapias que no deben usarse como tratamientos, que incluyen ZMapp y remdesivir.
La nueva guía, publicada simultáneamente en inglés y francés, ayudará a los proveedores de atención médica que atienden a pacientes con ébola, así como a los responsables políticos involucrados en la preparación y respuesta ante brotes.
Complementa la guía de atención clínica que describe la atención de apoyo optimizada que deben recibir los pacientes con ébola, desde las pruebas relevantes para administrar hasta el manejo del dolor, la nutrición y las coinfecciones, y otros enfoques que colocan a los pacientes en el mejor camino hacia la recuperación.
‘Mayor probabilidad de recuperación’
“Esta guía terapéutica es una herramienta crítica para luchar contra el ébola”, dijo el Dr. Richard Kojan, copresidente del grupo de expertos seleccionado por la OMS para desarrollar las directrices, y presidente de ALIMA, la Alianza para la Acción Médica Internacional.
“A partir de ahora, las personas infectadas con el virus del Ébola tendrán más posibilidades de recuperarse si buscan atención lo antes posible. Al igual que con otras enfermedades infecciosas, la puntualidad es clave, y las personas no deben dudar en consultar a los trabajadores de la salud lo antes posible para asegurarse de recibir la mejor atención posible”.
El copresidente Dr. Robert Fowler de la Universidad de Toronto en Canadá señaló que el ébola solía ser percibido como «un asesino casi seguro», pero los avances en la atención y la terapia durante la última década han revolucionado el tratamiento de la enfermedad.
“La provisión de la mejor atención médica de apoyo a los pacientes, combinada con el tratamiento con anticuerpos monoclonales (MAb114 o REGN-EB3), ahora conduce a la recuperación de la gran mayoría de las personas”, agregó.
Acceso oportuno crítico
Dado que el acceso a estos tratamientos sigue siendo un desafío, especialmente en áreas pobres, la OMS dijo que deberían estar disponibles donde más se necesitan, es decir, en lugares donde se están produciendo brotes activos de ébola o donde la amenaza de un brote es alta o muy probable.
La agencia de la ONU está listo para apoyar a los países, fabricantes y socios para mejorar el acceso a los dos medicamentos.
“Hemos visto avances increíbles tanto en la calidad como en la seguridad de la atención clínica durante los brotes de ébola”, dijo la Dra. Janet Diaz, jefa de la unidad de gestión clínica del programa de Emergencias Sanitarias de la OMS.
“Hacer bien lo básico, incluido el diagnóstico temprano, brindar atención de apoyo optimizada con la evaluación de nuevas terapias en ensayos clínicos, ha transformado lo que es posible durante los brotes de ébola. Esto es lo que ha llevado al desarrollo de un nuevo estándar de atención para los pacientes. Sin embargo, el acceso oportuno a estas intervenciones que salvan vidas debe ser una prioridad”.
