Un año después de que Afganistán volviera a caer bajo el control de los talibanes, esa nación en problemas vuelve a estar en los titulares. Afganistán ha sido nombrado uno de los cuatro países de enfoque de este año para el Día Internacional de Oración por la Iglesia Perseguida (IDOP) de la Alianza Evangélica Mundial, junto con Argelia, India y Sri Lanka.
La WEA hizo el anuncio junto con el Día Internacional de las Naciones Unidas en Conmemoración de las Víctimas de Actos de Violencia Basados en la Religión o las Creencias, que se celebra el 22 de agosto.
“La WEA condena enérgicamente la violencia contra cualquier persona o grupo basada en su fe. Abogamos por la libertad religiosa para todos, en todas partes, todo el tiempo”, dijo el secretario general de la WEA, Thomas Schirrmacher, quien también es cofundador del Instituto Internacional para la Libertad Religiosa.
En todo el mundo, más de 360 millones de cristianos, o 1 de cada 7 a nivel mundial, enfrentan persecución por su fe. Esto puede incluir violencia del gobierno, la comunidad local o dentro de la familia.
La WEA colabora con las Naciones Unidas, la Asociación de Libertad Religiosa y los líderes mundiales y nacionales de todas las religiones para poner fin a las restricciones a la libertad religiosa, que está garantizada por la Declaración Universal de Derechos Humanos de la ONU.
“La WEA hace un llamado regular a los gobiernos de todo el mundo para que cumplan con los estándares internacionales de derechos humanos”, dijo Janet Epp Buckingham, directora de Global Advocacy. “Esto significa proteger a las minorías religiosas y permitir que todos practiquen su religión libremente. Continuaremos dando voz a los que no tienen voz en los más altos niveles de poder”.
Cada año, la WEA lleva a cabo IDOP en noviembre, llamando a los cristianos de todo el mundo a orar por aquellos que son perseguidos por su fe o creencias.
“Cada vez que le pregunto a un cristiano perseguido qué podemos hacer por él, la respuesta es siempre la misma: ore por nosotros”, dijo Godfrey Yogarajah, embajador mundial para la libertad religiosa de la WEA.
“A lo largo de los años”, agregó Schirrmacher, “IDOP ha servido como un llamado de atención para que la Iglesia recuerde a aquellos que enfrentan persecución en diferentes partes del mundo. Al hacerlo, IDOP también ha servido como plataforma para amplificar los desafíos que enfrentan los cristianos perseguidos y llamar la atención mundial sobre sus historias”.
La situación en los cuatro países de enfoque para el IDOP de este año es la siguiente:
Afganistán es el lugar más peligroso del mundo para ser cristiano. Cuando los talibanes tomaron el poder hace un año, la mayoría de la pequeña población cristiana tuvo que huir o esconderse.
En Argeliaun estado musulmán en el norte de África, las iglesias se han visto obligadas a cerrar y los líderes de la iglesia han sido acusados de blasfemia y proselitismo cuando realizaban actividades normales de la iglesia.
India es una nación de mayoría hindú donde el cristianismo ha estado bajo una presión cada vez mayor. La presión social y familiar sobre los cristianos va en aumento. Los gobiernos de 11 estados de la India han introducido leyes contra la conversión, por lo que es un delito que los cristianos compartan su fe.
Sri Lanka es un estado de mayoría budista donde los cristianos se han enfrentado a la violencia durante muchos años. Esto incluye incidentes de discriminación e intimidación por parte de funcionarios estatales y casos de acoso y violencia por parte de miembros de la comunidad. Sri Lanka enfrenta actualmente el desafío adicional de una crisis financiera.
Para más información sobre el Día Internacional de Oración por la Iglesia Perseguida, visite idop.org.
