Comunicado de www.vaticannews.va — 
El número de muertos por el potente terremoto de magnitud 6,9 que azotó Filipinas anoche sigue aumentando, especialmente en el extremo norte de la isla de Cebú, un popular destino turístico. Según datos, el epicentro se localizó frente a la costa de la ciudad de Calape.
Roberta Barbi – Ciudad del Vaticano
El terremoto se produjo a las 21:59 hora local con toda su fuerza, alcanzando una magnitud de 6,9 en la escala de Richter. Fue seguido por fuertes réplicas, una de ellas de magnitud 6, que se sintieron en toda la zona central de Filipinas. A pesar de tener su epicentro en alta mar, frente a la isla de Cebú, con más de 3,4 millones de habitantes, no se emitió ninguna alerta de tsunami.
Las zonas más afectadas
Las localidades más afectadas son Bogo, de 90.000 habitantes, donde se derrumbaron numerosos edificios y se reportan unas treinta víctimas, y San Remigio, donde el alcalde declaró el estado de emergencia y solicitó alimentos y agua para los desplazados. Se prevé que el número de muertos aumente, según los equipos de rescate, y todos los hospitales de la isla ya están desbordados por la gran cantidad de heridos, que pronto podrían ser trasladados a otros lugares. De hecho, el aeropuerto de la isla permaneció operativo a pesar del terremoto de magnitud 6,9 confirmado. El presidente filipino, Ferdinand Marcos, expresó sus condolencias por las víctimas y aseguró a la población una respuesta rápida.
Se publicó primero como Terremoto en Filipinas, al menos 69 muertos
