Comunicado de www.vaticannews.va —
Don Matthew Eya, párroco de San Carlo en la zona de Eha-Ndiagu, regresaba a su parroquia cuando los asesinos lo esperaron para matarlo. Es el enésimo acto de violencia contra un sacerdote católico. Mientras tanto, también se teme por la vida de otro religioso secuestrado por hombres armados hace unos días en una zona fronteriza con Níger.
Federico Piana- Ciudad del Vaticano
Una motocicleta se acerca al coche en marcha de don Matthew Eya, uno de los dos hombres que la conducen dispara a las ruedas haciendo que el coche se salga de la carretera, luego el asesino se baja y, a quemarropa, dispara al religioso, que muere en el acto. En Nigeria se ha consumado así el enésimo acto de violencia contra un sacerdote católico. El trágico episodio tuvo lugar la tarde del pasado viernes 19 de septiembre en la carretera del área metropolitana de Nsukka, en el estado sudoriental de Enugu, pero la noticia no se ha difundido hasta hoy, 22 de septiembre.
Asesinado sin piedad
Según testimonios recogidos por la prensa local, don Matthew Eya, párroco de San Carlo en la zona de Eha-Ndiagu, regresaba a su parroquia cuando los asesinos lo esperaron para matarlo. La reacción de la policía fue inmediata y, en el marco de la investigación iniciada para descubrir a los culpables, detuvo a 38 personas, mientras que el Gobierno del estado de Enugu difundió un comunicado en el que prometía una recompensa de 10 millones de nairas, unos 5.700 euros, a cualquiera que ayudara a las fuerzas del orden a capturar a los asesinos. «Estamos profundamente conmocionados por lo sucedido», declaró monseñor Cajetan Iyidobi, canciller de la diócesis de Nsukka, quien, en un mensaje dirigido a todos los fieles, expresó «total sumisión a la voluntad de Dios Todopoderoso y firme esperanza en la resurrección de los muertos».
Se teme también por el padre Ezemba
Mientras tanto, aún no se tienen noticias de otro sacerdote secuestrado el pasado 13 de septiembre en el estado de Kogi, en la frontera con Níger. El padre Wilfred Ezemba, párroco de San Pablo, en la zona de Olamaboro, fue secuestrado junto con otros viajeros por unos hombres armados en la carretera que une la zona de Imane con la de Ogugu. Según un informe reciente difundido por la Secretaría Católica de Nigeria, en los últimos diez años han sido secuestrados más de 140 sacerdotes en el país africano, mientras que los asesinados superan la decena.
Se publicó primero como Nigeria: otro sacerdote asesinado en una emboscada