InicioReligiónSube a 138 el número de muertos en el operativo de Río...

Sube a 138 el número de muertos en el operativo de Río de Janeiro

-

Comunicado de www.vaticannews.va —

Civiles y agentes entre las víctimas de la gran operación policial contra el grupo criminal Comando Vermelho. La ONU y la Corte Suprema de Brasil piden investigaciones, reformas y respeto a los estándares internacionales. Mientras tanto, el cardenal Orani João Tempesta, arzobispo de Río, lanza un llamado en favor de la paz, la solidaridad y la defensa de la vida humana

Sara Costantini – Ciudad del Vaticano

Sigue aumentando el número de víctimas de la gran operación policial llevada a cabo en las favelas del norte de Río de Janeiro. Según los últimos datos, son 138 los muertos en lo que ya se considera la redada más sangrienta en la historia de la ciudad. La intervención, denominada Contencióninvolucró a 2.500 agentes de fuerzas especiales contra presuntos miembros del Comando Vermelho, la principal organización criminal del estado de Río. El objetivo era frenar la expansión territorial del grupo, activo en el tráfico de drogas y armas.

Llamamiento del cardenal Tempesta

Mientras crece el dolor y la tensión sigue altísima, se alza la voz de la Iglesia de Río. El arzobispo de la metrópoli brasileña, el cardenal Orani João Tempesta, expresó su «profundo dolor por tantas vidas truncadas», subrayando que «la violencia y el miedo han herido el corazón de nuestra ciudad y robado la paz a muchas familias».

El cardenal recordó que, ante una tragedia semejante, «no podemos permanecer indiferentes» e invitó a un examen de conciencia colectivo: «La vida y la dignidad humana – dijo – son valores absolutos. La vida es un don sagrado de Dios y debe ser siempre defendida y custodiada».

Mientras tanto, en la avenida principal del Complejo de la Penha, donde viven más de doscientas mil personas, los cuerpos de las víctimas, recogidos por los propios habitantes durante la noche, fueron colocados a lo largo de la vía. Los videos difundidos en las redes muestran escenas de guerra: bombas lanzadas desde drones, disparos incesantes, autobuses incendiados utilizados como barricadas. La ciudad quedó paralizada: vuelos cancelados en el aeropuerto de Galeão, escuelas y comercios cerrados antes de tiempo.

La ONU pide verdad y reformas

El Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Volker Türk, exhortó a Brasil a aplicar una «reforma eficaz y completa de los métodos policiales». «Entiendo perfectamente – declaró – el problema de tener que enfrentar grupos criminales violentos y bien organizados como el Comando Vermelho. Sin embargo, la larga lista de operaciones que terminan con tantas víctimas plantea la cuestión de cómo se gestionan estos operativos».

Türk recordó que «es necesario romper el ciclo de extrema brutalidad y garantizar que las operaciones de las fuerzas del orden respeten los estándares internacionales sobre el uso de la fuerza».

El alto funcionario de la ONU también pidió llevar a cabo «investigaciones independientes y eficaces» y crear mecanismos que permitan a las familias y comunidades afectadas «acceder a la justicia y a compensaciones». Concluyó con un llamado firme: «Es necesario poner fin a un sistema que perpetúa el racismo, la discriminación y la injusticia».

El secretario general de la ONU, António Guterres, expresó su «profunda preocupación» y pidió una investigación «rápida e imparcial» sobre el respeto de los estándares internacionales en materia de derechos humanos.

Interviene la Corte Suprema

La Corte Suprema de Brasil también solicitó explicaciones al gobernador Cláudio Castro, exigiendo un informe detallado sobre las modalidades del operativo, el uso de la fuerza y la asistencia a las familias de las víctimas. Por su parte, el presidente Luiz Inácio Lula da Silva afirmó que no quiere «tolerar que el crimen organizado siga destruyendo familias, oprimiendo a los residentes y propagando la violencia en las ciudades», anunciando una coordinación más estrecha entre las fuerzas de seguridad para «combatir el narcotráfico sin poner en riesgo a niños y familias inocentes».

Un llamado a la paz

El cardenal Tempesta quiso ofrecer una palabra de esperanza a la población de Río: «Estamos llamados, como discípulos de Cristo – recordó – a ser constructores de paz. Debemos superar el odio, la venganza y la indiferencia que corroen el tejido social y unir nuestras fuerzas por la reconciliación y la construcción de una sociedad pacífica, que promueva la dignidad de cada persona, especialmente de los más pobres y vulnerables».

Las palabras del cardenal resuenan como un llamado a la esperanza: «Incluso ante el caos – dijo – creo firmemente que el amor y el bien son más fuertes que cualquier violencia. Que el Señor de la vida sane las heridas de nuestro pueblo y nos haga instrumentos de su paz».

Se publicó primero como Sube a 138 el número de muertos en el operativo de Río de Janeiro

- Publicidad -spot_img

Selección