Comunicado de www.vaticannews.va —
Desde las 9 de la mañana las puertas del espléndido espacio en las afueras de Roma se abrieron de par en par para acoger a los miles de jóvenes que viven su Jubileo.
Sebastián Sansón Ferrari – Tor Vergata, Roma
Sobres de dormir, colchonetas, nebulizadores para aliviar el calor romano, protector solar, mochilas, tiendas de campaña… son solo algunos de los elementos que conforman el paisaje humano y espiritual de la explanada de Tor Vergata, en las afueras de Roma. Este vasto espacio, que en el año 2000 acogió la inolvidable Jornada Mundial de la Juventud con San Juan Pablo II, vuelve a vibrar este sábado 2 y domingo 3 de agosto con la presencia de más de medio millón de jóvenes convocados por el Jubileo de los Jóvenes, que tiene como momentos centrales la vigilia de oración y la Santa Misa presididas por el Papa León XIV.
Desde las nueve de la mañana, miles de peregrinos comenzaron a ocupar sus lugares entre cantos, oraciones y sonrisas. El cielo alternaba nubes y sol mientras las banderas de decenas de países y movimientos eclesiales ondeaban al viento: Brasil, Polonia, Nigeria, Filipinas, Argentina, Canadá, Colombia, España… también se hacía visible la presencia de comunidades como el Camino Neocatecumenal, la Comunidad Católica Shalom, la Renovación Carismática, entre otros.
Los animadores, desde el gran escenario central, encendían el entusiasmo de la multitud con preguntas que hacían estallar los aplausos: “¿Quién está listo para recibir a nuestro querido Papa?” Y la respuesta, como un solo grito de fe, se alzaba con fuerza: “¡Esta es la juventud del Papa!”
Zeltzin Corrales Amaro, coordinadora de la Pastoral de Adolescentes de la Diócesis de Izcalli, en México, expresó conmovida:
“Sé que este es un momento de nuestra Iglesia que solo sucede cada 25 años, así que poder estar aquí me llena de emoción. Me fortalece a mí, a mi comunidad y a toda la pastoral que represento. Es increíble ver tantos jóvenes siguiendo a Dios desde todos los rincones del mundo. ¡He visto banderas que jamás había visto antes!”
Las expectativas de los jóvenes son tan diversas como profundas. Luisa Navarro, de Colombia, compartió:
“La alegría no solo se vive en mi país, en mi ciudad o diócesis, sino que esto realmente mueve al mundo. Esto puede cambiar generaciones que hoy están alejadas, que buscan otras felicidades. Aquí vemos que la verdadera alegría tiene rostro y se llama Jesucristo.”
El ecuatoriano Santiago Benavides, del Camino Neocatecumenal, aseguró:
“La razón por la que estoy aquí es vivir la fe en comunidad, con el Papa y con jóvenes que buscan lo mismo: rezar juntos, compartir, celebrar nuestra fe. Este encuentro hace realidad un deseo profundo que he tenido por mucho tiempo”.
Por su parte, Alberto Echevarne Ramos, de la Parroquia de Nuestra Señora del Buen Suceso en Madrid, señaló:
“Somos más de 500.000 jóvenes reunidos con un mismo espíritu. Es esperanzador ver que no estamos solos, que muchos van a misa, cantan los mismos cantos, rezan lo mismo. Eso me hace muy feliz. Este encuentro es una inyección de esperanza”.
El ambiente se mantiene animado con presentaciones musicales de artistas de diversas procedencias, que ofrecen canciones llenas de fe, esperanza y fraternidad. Jóvenes de distintas lenguas y culturas bailan, cantan, se abrazan. Cada estrofa resuena con un mismo anhelo: el deseo de paz, el compromiso con la fraternidad universal y la voluntad de construir juntos un futuro mejor.
La vigilia de oración con el Santo Padre León XIV y la Misa conclusiva son los momentos culminantes de este Jubileo, que no termina aquí en Tor Vergata. Cada joven volverá a su diócesis con la misión de anunciar la paz y la salvación de Jesucristo, sembrando lo vivido en sus comunidades.
En este clima de fiesta y oración, Tor Vergata se ha convertido en un verdadero laboratorio de paz, donde la juventud del mundo entero reafirma su compromiso con la construcción de una civilización del amor.
Se publicó primero como La «Juventud del Papa León» llena la explanada de Tor Vergata