Comunicado de www.vaticannews.va —
Desde la Basílica de Santa Sofía en Roma, ayer 2 de mayo, fue enviado un barco de carga para ayudar a las poblaciones en dificultad. El párroco: «Estamos seguros de que el Santo Padre seguirá ayudándonos desde el cielo y lo hará aún más. Ha permitido que la esperanza no muera».
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Artículos de primera necesidad, ropa, productos de higiene, medicinas y alimentos. Este es el cargamento de ayuda que salió ayer, 2 de mayo, de la Basílica de Santa Sofía, la iglesia ucraniana en Roma, que desde el comienzo de la guerra se ha convertido en un punto de recogida para el país oriental. El cardenal Konrad Krajewski, limosnero del Papa, ha visitado aquí varias veces para traer el apoyo de Francisco, que siempre ha prestado ayuda a la «atormentada Ucrania». El de ayer fue el camión número 131 que salió desde allí, el último querido por el propio Papa y con destino a las regiones que más sufren a causa del conflicto.
Francisco se mantiene cerca
Así lo confirma un comunicado de la Pro-Catedral de Santa Sofía, que afirma que el regalo del Papa es «la expresión final de su amor y apoyo al pueblo ucraniano». En el camión subieron feligreses, voluntarios, estudiantes del Pontificio Colegio San Josafat, sacerdotes y representantes de la comunidad ucraniana en Roma. Una vez terminada la carga, todos se reunieron en la catedral para una oración conjunta por la paz en Ucrania, por los heridos, los desplazados y todos los que están en las zonas de combate. Esta ayuda —informaron los organizadores de la misión— no es solo una contribución material, sino también una profunda muestra espiritual de solidaridad y amor. El Papa Francisco no olvidó al sufrido pueblo ucraniano hasta su último aliento.
Nuestra esperanza nunca ha muerto
En declaraciones a SIR, el padre Marco Yaroslav Semehen, párroco de Santa Sofía, recordó la constante cercanía de Francisco a la misión humanitaria nacida en torno a la Basílica. Los paquetes y la ayuda llegaron de forma continua y sistemática a través del Cardenal Krajewski. Puedo decir que en cada camión había ayuda del Papa Francisco. Estamos seguros de que desde el cielo el Santo Padre seguirá ayudándonos y lo hará aún más. Sin embargo, lo más grande que el Papa Francisco hizo por nosotros fue no permitir que nuestra esperanza se apagara jamás.
Se publicó primero como Partió el 131º envío de ayuda para Ucrania querido por el Papa
